La media sanción del Senado bonaerense que habilita la reelección indefinida de legisladores genera repercusiones políticas y económicas, tanto en el país como en el exterior.
Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con el economista, Eduardo Jacobs, quien comentó que, “la política no respeta a la misma política”, aludiendo a la falta de continuidad institucional en Argentina. Para el entrevistado, esta decisión representa un quiebre en la lógica democrática: “No es que vos ganás una elección, planteás un esquema y sobre ese esquema se empieza a construir”.
Además, cuestionó la falta de coherencia dentro del propio oficialismo y sectores de la oposición: “Lo peor de todo no es el voto de Magario, lo peor de todo es el voto de un conjunto de exlibertarios y de Encuentro Federal”, remarcó.
Consecuencias en la estabilidad económica
El especialista señaló que este tipo de decisiones impacta directamente en la percepción económica de Argentina ante los mercados. “Ahí sí entendés por qué Argentina tiene el riesgo país que tiene”, explicó, señalando que el contexto institucional termina pesando más que algunos indicadores macroeconómicos.
A modo de ejemplo, mencionó el caso de Formosa: “No es grave solamente que Gildo lleva 40 años ahí, sino que el presidente del Senado es un hombre suyo”. Esto, según Jacobs, debilita la credibilidad democrática y desincentiva la inversión.
Justicia y señales al mercado
En contraste, destacó como hecho positivo el reciente avance judicial contra figuras del kirchnerismo. “Cuando pasan cosas como lo de Cristina, la justicia dijo presente después de muchos años de complicidad silenciosa”, apuntó. A su juicio, estos gestos institucionales son valorados por los mercados y podrían mitigar impactos negativos.
Jacobs recordó que las causas judiciales más relevantes llevan más de una década estancadas: “La causa de Cristina tiene 18 años, sale la sentencia ahora. Se viene el juicio de los Cuadernos, que tiene otros 13 años”.
Geopolítica y petróleo: impacto incierto
Sobre el escenario internacional, Jacobs se mostró cauto. Habló de la tensión en Medio Oriente y su eventual impacto en la economía nacional: “Sí, efectivamente, si tenemos un aumento de los precios del petróleo, nos va a pegar”, aunque advirtió que por el momento no se esperan cambios drásticos. También valoró la postura clara de Argentina en apoyo a Israel y Occidente.
Frente a un contexto mundial volátil, resaltó la necesidad de esperar cómo se desarrollan los conflictos internacionales y cómo impactan finalmente en el país.
Inflación: hacia un escenario más predecible
Respecto al panorama local, Jacob fue optimista sobre la inflación. “El desplome de la tasa de inflación es un hecho, lo marcan todos los indicadores”, aseguró. Sin embargo, advirtió que el proceso será gradual debido a los precios rezagados y la inercia inflacionaria.
“Vamos a pasar de ser una economía cuasi hiperinflacionaria a una de estabilidad”, pronosticó. En su análisis, el país podría cerrar el año con una inflación mensual inferior al 1%, lo cual permitiría avanzar en otros ajustes sin temor al efecto dominó de los precios.